8 de abril de 2013

Substancia

Somos la hierba de la tierra
que germina en la casualidad
crece con la duda
resiste los embates del clima
y florece antes de secarse.

Que bella es la palabra
como el pétalo de un lirio
suave y delicada
se exhibe desde el capullo
del pensamiento.

Amar el tiempo prestado
el suspiro que nos toca
para reír, amar y sentir.
Para edificar momentos nuevos
que se siembren en la médula
de la vida.

Felicidad es un instante
un sol en las tinieblas del dolor.
Quien conoce aquella luz
no la olvida jamás
ni la confunde con la luna.

Seamos justos pues
con esta tierra que nos da vida.
Que una lagrima riegue la raíz
y haga fuerte contra el viento
el tallo de nuestra templanza.

Y llenemos de verdes pastizales,
floreados desiertos grises
la soledad que no perdona.
Hasta que el tiempo nos seque
seamos substancia divina.




1 comentario:

rafiz_glam dijo...

tiene algo que cautiva