4 de enero de 2014

Aciertos

Una lata de cerveza
la musicalidad de romper su indemnidad
en el frío
que envuelve sus componentes químicos.
Una lata simple
de bajo costo
de contenido nocivo y extrañamente agradable
de hedor contagioso, relación enfermiza.
Tengo una a mi lado
y bebo su interior tranquilo.
Mi paladar conocedor de las sensaciones
ignora la inestabilidad de mi conciencia
siento el peso de mis días
atravesando con frío mis entrañas.
Placer completo
si mi mano libre juega con un cigarrillo
ambas juegan roles aprendidos
y como expertas me conducen a la paz.
Creo en los espíritus
son incondicionales por la noche
me guían a la ebriedad y a mi descanso
fieles y comprometidos trabajadores.
Tantas latas que han existido
en circunstancias diferidas e irrepetibles
amo las inesperadas e insolentes
que surgen sin misión alguna
a llenar mi mano una noche sola.
Cierro mis ojos
y me parece ver que mi tiempo pesa.
Recuerdo tantas decepciones
y momentos crudos como el metal.
Mis errores y los ajenos
que se clavan evidenciando mi impotencia
para ser mejor
ser el máximo acertista humano.
Como decepciono la esperanza impuesta
que pesa como la noche.
Perdí
la derrota se repetirá mil noches
y cuando el dolor se vuelve molesto
levanto mi mano
y agradezco el trago que no volverá.